Un jefe muy Satisfayer

Sara está decidida a quedarse con una buena porción de la suculenta tarta que supone la venta de las bodegas de su abuelo, un hombre de negocios que siente auténtica devoción por ella. Así las cosas, obliga al comprador a firmar un contrato blindado con su nieta, que le asegura una posición económica desahogada de por vida.Consciente de su total respaldo, la joven protagonista arrasa con su innato desparpajo y tremendo descaro tan pronto como pone los pies en unas oficinas en las que se encuentra con Jorge, el nuevo jefe y víctima de sus artimañas. Atractivo a rabiar, tendrá que derrochar paciencia con su recién incorporada recepcionista.A pesar de que en principio se tiran los trastos a la cabeza, parece que soplan vientos de cambio para ambos…